Lesiones por sobreuso del hombro: Causas comunes y factores de riesgo
Las lesiones de hombro por sobrecarga son frecuentes entre deportistas y trabajadores que realizan movimientos repetitivos y extenuantes. Actividades como la natación, los lanzamientos (jabalina, balonmano) y el culturismo, así como los trabajos que requieren movimientos por encima de la cabeza (pintores, carpinteros, camareras y peluqueros), ejercen una presión constante sobre la articulación del hombro y los músculos que la rodean. El hombro es especialmente vulnerable debido a su amplitud de movimiento y a la forma en que depende de los tejidos blandos para su estabilidad. Con el tiempo, esta tensión repetitiva puede causar inflamación, desgarros musculares o incluso daños a largo plazo en el manguito de los rotadores, los tendones y los ligamentos.
Las lesiones por sobreuso más comunes en el hombro son la tendinitis del manguito rotador, la bursitis y el síndrome de pinzamiento del hombro. Estas lesiones se producen cuando los tendones y los músculos del hombro se estiran constantemente más allá de su capacidad, lo que provoca dolor, hinchazón y reducción de la función. La inflamación suele ser un factor clave en estas afecciones y, si no se trata, puede provocar dolor crónico y posibles daños permanentes.
Un calentamiento y unos ejercicios de fortalecimiento adecuados son esenciales para reducir el riesgo de lesiones por uso excesivo. Sin embargo, incluso con medidas preventivas, los atletas y las personas que realizan movimientos repetitivos deben escuchar a su cuerpo y tomarse días de descanso para evitar una tensión excesiva en el hombro.
Prevención y tratamiento de las lesiones por uso excesivo del hombro
La prevención de las lesiones de hombro comienza con una técnica y una postura adecuadas, sobre todo durante actividades como el levantamiento de pesas, la natación o cualquier deporte que implique movimientos por encima de la cabeza. También son beneficiosos los ejercicios del manguito de los rotadores dirigidos a la fuerza y la estabilidad del hombro. Las rutinas regulares de estiramientos ayudan a mantener la flexibilidad, garantizando que los músculos del hombro no estén sometidos a una tensión excesiva.
Si se produce una lesión por sobrecarga, lo primero que hay que hacer es dejar descansar el hombro y evitar movimientos que agraven el dolor. El hielo puede ayudar a reducir la hinchazón, mientras que los antiinflamatorios pueden aliviar las molestias. En los casos más graves, puede ser necesaria la fisioterapia para recuperar la fuerza y la movilidad. Si los síntomas persisten a pesar de los tratamientos conservadores, pueden considerarse opciones quirúrgicas para reparar los tejidos dañados.